Nuestra historia
Inicia en 1920, cuando la familia Toro llegó al Quindío desde Pitalito, Huila, trayendo consigo un saber ancestral en el arte de curar.
Narciso Toro, inspirado por su padre, perfeccionó remedios naturales que ganaron la confianza de su comunidad. Junto a su esposa, fundó la Droguería Los Andes en Armenia, símbolo de cuidado y cercanía por décadas.
Hoy, ese legado vive en Narciso de los Andes, una marca que une tradición y ciencia para ofrecer bienestar corporal con ingredientes naturales.